|
Portada del libro de Iñaki Sagredo |
El historiador Iñaki Sagredo publica “La Batalla de Amaiur. La historia perdida de Navarra”
(Pamiela) cuando este 19 de julio se cumple 500 años de la desigual caída del
último castillo que defendió la Navarra soberana con unos 150 hombres
frente, al menos, a los 7.000 efectivos del ejército que seguía las órdenes de
Castilla.
Una batalla
muy desequilibrada, de resistencia poética, que había comenzado en 1512 y
continuado con la sistemática destrucción durante diez años de toda fortaleza navarra
para someter la moral de los legitimistas, como reproduce un documento de Sagredo
con las cuentas de los costes del delegado castellano Rena para arruinar las
murallas de Olite, Tafalla y Tudela.
Es solo un
ejemplo del variado y rico material gráfico de este nuevo libro, que recrea
sobre todo cómo era el eventual castillo en el que dirigió la resistencia el
capitán Jaime Vélaz de Medrano y que se abre con una foto del monolito levantado
por la Diputación, dinamitado en 1932 y reconstruido en 1982, entre otros, por
canteros del taller de Olite que tallaron el escudo de nuestra localidad entre
los cinco de las merindades.
El libro de
Sagrado, entre mil cosas, también recoge el listado de algunos de los navarros
derrotados en la mítica batalla, entre ellos los hermanos Víctor y Luis Mauleón
del mismo tronco que Carlos Mauleón que había muerto en Noáin en 1521 y enterrado en Olite posiblemente en el
panteón familiar de San Francisco.
La
presentación de esta nueva y documentada obra está firmada por nombres conocidos y
cercanos, como Juan José Ucar Muruzábal que lo hace en euskera, el medievalista
Mikel Zuza en castellano y la vecina de Uxue Brigitte Lecesve en francés.
El
investigador y director del grupo arqueológico Larrate tiene una fama de rigurosidad labrada a pulso, a golpe de autogiro volador, con la que ha sellado
su colección “Castillos que defendieron el reino” de Pamiela.
Medio siglo
después, Iñaki Sagredo levanta novedosas recreaciones del último castillo fiel
al reino y acude a fuentes primeras para contar el origen de la fortaleza,
describir paso a paso la batalla y, después, plantea seis rutas turísticas por
la zona. Todo, como suele hacer el autor, con abundante fotografía,
ilustraciones y planos.